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lunes, 2 de enero de 2012

La bebedora de absenta (óleo sobre táblex, 1998)


Soledad y decadencia frente a la copa cómplice

Durante la "Belle Époque", París y su bohemia alucinaron con la bebida de ajenjo conocida como absenta que reinó en Montmartre y el Moulin Rouge.

Henri de Toulouse Lautrec, Edouard Manet, Edgar Degas, Paul Gauguin, Vincent Van Gogh, Pablo Picasso, son sólo algunos de los pintores que además de sucumbir a los efluvios alucinógenos del ajenjo, le dedicaron numerosos trabajos. La música, los carteles publicitarios, el cine y, en general, todas las formas de expresión artística rindieron culto y tributo a esta bebida.

Picasso, 1901
Entre las muchas obras pictóricas que se dedicaron al licor y sus adictos, hemos seleccionado este cuadro, pintado en 1901, en el que Picasso plasmó descarnadamente el estado de evasión solitaria producido por el licor alucinógeno.

Su innegable atractivo, sedujo a nuestro autor F. R. Mayoral  que pintó su copia facsímil en 1998.

A principios del siglo pasado, se bebían en Francia millones de litros de absenta al año y era, de todos los licores disponibles, el más consumido entre los parisinos. Pero no sólo París conoció las “bondades” de la absenta; también en Buenos Aires, se bebía en los círculos intelectuales, y no faltaron las letras de tango que le cantaron al elixir mágico, conocido como "el hada verde" por sus efectos psicoactivos y estimulantes de la imaginación y la creatividad.


Óleo sobre táblex (enmarcado)
Formato: 64x49 cm
Tamaño enmarcado: 72,5x57,5 cm
Consultar disponibilidad y condiciones.

4 comentarios:

  1. Me encanta este cuadro y todo lo que evoca...
    Fantástico!

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  2. Coincidimos, querido/a anónimo/a. Especialmente en lo que concierne a todo lo que evoca. Gracias.

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  3. Es una obra sumamente atractiva, Francisco Rodríguez Mayoral, que supiste captar con gran delicadeza y acierto. La obra habla por sí solla y tú nos la relatas espléndidamente en el blog. Un abrazo.

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  4. Muchísimas gracias, amigo Teo. Fuerte abrazo.

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