Para mi hermano y Berta, pintado en 1996 |
Nadie como el maestro Matisse para deslumbrar por su expresividad cromática y la distorsión de las formas, representativas del fauvismo. Sus obras se caracterizan por una gran luminosidad, hasta el punto de que se decía de él que llevaba la luz dentro y la trasladaba a sus cuadros mediante sus pinceladas sueltas y libres.
Henri Matisse,1943 |
Los bodegones de cítricos de Henri Matisse son un verdadero canto al color, él mismo dijo que "oyó cantar los colores". Colores, los suyos, que son como notas de música que componen una deslumbrante melodía visual.
Hacía mucho tiempo que este cuadro de Matisse, "Limones y saxífraga (hortensia)", me tenía cautivado; no me cansaba de admirar el equilibrado ritmo de su composición y la simplicidad de su fuerza cromática. Por ello, no dudé en pintarlo en 1996 para llenar de música y luz el comedor de mi hermano y su mujer.
Acrílico sobre cartón.
Formato: 50x70 cm
No disponible (puede duplicarse por encargo en formato a medida).
No hay comentarios:
Publicar un comentario